El voto de la mayoría de los colombianos giró a la izquierda y gracias a ello, Gustavo Petro se posesionará como presidente el próximo 7 de agosto para un período de cuatro años. El triunfo de Petro se sube en hombros de “los nadie”, como se hicieron llamar.
Desde el momento de su triunfo, Petro anunció que impulsará un Gran Acuerdo Nacional y reiteró las promesas sobre un profundo cambio para el país en torno a la paz, la justicia social y la justicia ambiental; en contraste con el gran reto de tranquilizar a los mercados y moderar las expectativas de quienes lo eligieron y la especulación que se está formando a partir de propuestas económicas como la de no firmar un solo contrato de explotación petrolera más —como parte de la transición energética— o aumentar el gasto público.
En el siguiente informe hablaremos de los retos y proyecciones en materia económica, política y social para aminorar el nerviosismo latente en el país y cómo terminan los cuatro años de Iván Duque en los que tuvo que capotear: dos paros nacionales, tres reformas tributarias, una pandemia, la debacle jurídica de Álvaro Uribe Vélez y una crisis económica mundial.
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